Libros: El Código Da Vinci

Hace poco terminé, tras tres o cuatro o indefinidos largos y agónicos meses intentándolo, leer este libro.

Para mí es un logro el haberlo terminado, pues cuando tuvo el bombazo mediático y todos hablaban de él y su argumento no tenía gana alguna de leerlo; siempre he sido un enemigo acérrimo de los Best Sellers y de los libros que al cabo de cinco años acaban convertidos en tostones de telefilmes que echan por Telecinco después de comer los sábados.

El cómo empecé a leerlo tiene su lógica; iban a sacar la película y había una persona que quería verla. Como soy así de guay y de friky, y viendo el destrozo parcial que le hicieron a El Señor de los Anillos, decidí leerlo y no perder detalle. Tenía un reto, acabar antes del estreno, y por aquel entonces faltaban dos semanas; no llevaba mitad del libro cuando vi la película.

Una vez terminado estoy en disposición de decir que creo que el libro no se merece tantas críticas, pues ha sabido dibujar una ficción que rozaba muchas veces la realidad, y para mí ése es el tipo de tramas que más me gustan, las que te hacen dudar de su realidad. Siendo un argumento muy lineal, Dan Brown - el autor - sabe manejar los capítulos de tal modo no se haga un calvario. También es de agradecer el que no se haya utilizado un lenguaje demasiado refinado, pues hay escritores que afrontan best sellers como si fuera la continuación de El Quijote de la Mancha.

Los personajes principales, Langdon y Sophie Neveu muchas veces actúan de forma artificial, y éste es el punto negativo del libro. El autor forzó muchas situaciones; si te persigue medio París lo último que se te ocurre es pararte en un parque de yonkis a ver una cosa. Lo primero es huir y luego ya veremos. También se ha echado en falta un poco de tensión sexual entre ambos protagonistas; omito el final del libro por si alguien no se lo ha leído, pero creo que el lector esperaba alguna escena que acercase a ambos personajes en otro plano que no fuese el de la ternura. En el libro Robert Langdon me ha parecido mucho más hueco de expresión que Sophie. Da la impresión que el papel de Langdon es el de informar al lector de lo que pasa y porqué; en la película pasa muchas veces por actor secundario.

Quizá, el truco de este libro es la trama, polémica y morbosa, que hace muy interesante cada capítulo. Dado mi ateismo orgulloso, sentía cierta picardía sobre cómo reaccionaba la iglesia en el libro (viendo la realidad, imagínense la ficción). Dan Brown, te aconsejo que el próximo libro vaya sobre la futura descendencia de los Bush, qué esconde el primer ministro norcoreano bajo la almohada, titularidad o no de Rául,... temas crispantes que nos mantendrán pegados a las páginas.

Aun así, en líneas generales he de decir que el libro está muy bien, un motivo más para espantar de mí esos escalofríos que me producen los best sellers masivos. La película me pareció correcta, y comparándolo con el libro ha seguido en casi todo momento su argumento, salvo tramos del final del libro, ciertos desenlaces.

Y ya está, poco más que añadir a un libro que para mí llega al 7 como muchísimo. Esperemos que haya segunda parte de este libro, mucho más erótica, provocadora contra la Iglesia, violenta, y porqué no, menos lineal.

Ahora tengo entre mis manos La Sombra del Viento, literatura española, de la buena y divertida. Cuando termine, de aquí a un lustro, y si google mantiene los blogs, comentaré.